Dicen que el tiempo es oro. Posiblemente valga más que el oro, puesto que se trata de algo limitado y finito. El tiempo no puede estirarse y todos, tenemos el nuestro. Lo único que podemos hacer al respecto, es invertirlo de la mejor manera posible, algo que olvidamos con demasiada frecuencia. No se puede regalar tiempo como tal, puesto que se trata de algo impalpable aunque cuantificable. Podemos medirlo, condensarlo y ponerle cotas, pero para los seres vivos, se trata de algo finito.
Sin embargo, nos encanta la sensación de tener el tiempo bajo control y dominarlo, aunque sea de forma efímera e irreal. Por eso, el ser humano, inventó el reloj. Con la finalidad de medir del tiempo y disponer su vida, merced al mismo. Se trata de algo ilusorio que nos ayuda a mantener nuestra vida encorsetada y dirigida. Permite establecer pautas, rutinas y saber en qué momento del día, nos encontramos. Algo que para muchos es fácil con mirar al cielo. Con esto no pretendo desdeñar el reloj. Al contrario, ¿a quien no le gusta este invento? Maravilla de las maravillas que, combina elegancia y practicidad, diseño y tecnología, al tiempo que nos permite no llegar tarde y planificar nuestra existencia.
De ahí que, gracias a este gran invento, regalar tiempo, sea posible. La mejor manera de hacerlo, aparte de compartir tu tiempo con las personas a las que quieres, es mediante un reloj. Por esta razón, hemos acudido a Joyería Lorena, donde la joyería es todo un arte y los relojes, un evento del que hemos querido formar parte. Ahora, podemos hablar de cómo elegir el mejor reloj cuando se quiere regalar el tiempo. Este mundo fascinante, el de la relojería, hace que cada pieza, cuente una historia. Se trate de un regalo, o algo personal, elegir el reloj adecuado, puede constituir una tarea de lo más emocionante. Estilo, funcionalidad y toque personal, residen en la elección.
Un reloj para cada ocasión
Los amantes de los relojes, cuentan con piezas de todo tipo, una para cada ocasión. La variedad de relojes disponibles es tan amplia que puede llegar a ser abrumadora. Conocer los tipos básicos es una buena forma de simplificar la elección del reloj más adecuado. Analógicos con su toque clásicos y elegante; digitales para los amantes de la funcionalidad y lo moderno; mecánicos y de cuarzo para los que buscan la mayor precisión.
En función de los tipos, podemos tener en consideración una serie de factores que nos facilitarán la elección de forma más acertada. A la hora de buscar el reloj perfecto, resulta fundamental, considerar la funcionalidad y el precio, a la vez que el diseño. Este último, debe ser un reflejo de la personalidad de quien vaya a llevar el reloj. Desde el estilo más clásico al más contemporáneo, el abanico es muy amplio y variado. En cuanto a la funcionalidad, este factor va a depender de las necesidades del usuario. Pueden necesitarse características específicas como el cronómetro o la resistencia al agua, entre otros factores. Lo relativo al precio, es un factor determinante, pero siempre existen opciones para adaptarse a cada bolsillo.
En el caso de que se trate de comprar un reloj como regalo, entra el añadido de la personalización y el significado del regalo. Puede optarse por un grabado personalizado o elegir el diseño que más refleje el gusto y estilo de la persona que lo va a lucir. El reloj puede ser un regalo más que significativo en ocasiones especiales y cargadas de simbolismo, como puede ser una graduación, aniversario o momentos especiales.
Una acción como la de regalar un reloj, constituye algo más que un mero intercambio de objetos. Consiste en una expresión de tiempo, compromiso y significado. Son muchas las culturas, en las que regalar un reloj, cuenta con unas connotaciones simbólicas únicas, haciendo que el obsequio se haya convertido en un tradición.
Regalar un reloj, en algunas culturas milenarias, como las asiáticas, se considera un gesto de buen augurio y buena fortuna. Se cree que, al entregar un reloj, se le desea a la persona que lo recibe un tiempo de prosperidad, lleno de éxito. Este simple gesto, refleja la importancia cultural que se le atribuye al tiempo, siendo la prosperidad procedente de una buena gestión del mismo.
Por el contrario, en occidente, regalar un reloj, simboliza compromiso y eternidad. Dada la naturaleza cíclica del tiempo que marca el reloj, representa un compromiso duradero, haciendo de los relojes, una de las elecciones más populares para celebrar aniversarios, compromisos o bodas.
En cualquier caso, para cada ocasión, existe el reloj ideal. Basta con conocer un poco la personalidad y estilo de la persona a la que se va a obsequiar el reloj, para escoger uno u otro modelo. La oferta es tan variada que resulta difícil no encontrar el adecuado.
La personalidad define el reloj
No se puede llevar el mismo reloj si te consideras elegante y distinguido (o distinguida) que si te gusta la aventura y eres intrépido o intrépida. Es cierto que algunos modelos, son tan atemporales como neutros y sirven para toda ocasión. Sin embargo, para los amantes del tiempo encorsetado en un reloj o aquellos que tienen la intención de regalar uno, la clave, reside en acertar.
Podemos diferenciar entre los siguientes para facilitarnos la tarea de búsqueda.
En primer lugar, hablaremos del clásico elegante. La personalidad es la de alguien que apuesta por lo atemporal, sofisticado y tradicional. Un reloj clásico es el más adecuado. Elegancia discreta que se define con estilo de vestir sobrio y refinado. Un reloj negro o marrón con una esfera sencilla, a la par que elegante. Marcas de prestigio como Rolex u Omega, son alguna de las opciones. Modelos con números romanos o esferas minimalistas, son un claro acierto.
Otra opción, es el moderno tecnológico. Para personalidades que se sienten muy cómodas con la innovación tecnología, disfruta de la conectividad y estar siempre a la última, los relojes más adecuados, no pueden ser otros que los inteligentes. Un smartwatch combina lo mejor de la última tecnología con el estilo más funcional. Ofrecen variedad de funcionas que se adaptan a todo tipo de necesidades. En este caso, regalar un reloj Apple o Samsung es todo un acierto. Proporcionan notificaciones, monitorean la actividad física en tiempo real… práctico y funcional, además de mostrar la hora.
Los más aventureros cuentan con una personalidad inquieta. No saben estarse en un sitio, adoran la actividad al aire libre y tienen un espíritu tan bohemio como trotamundos. El reloj ideal para estas personas, debe reflejar el dinamismo y la energía que les caracteriza. Se trate de estar en la montaña, el mar o la ciudad, el reloj debe ser robusto, resistente y perfecto para cada aventura. Relojes que cuenten con características técnicas específicas, resistentes a los golpes, el agua y las condiciones más extremas como los que ofrece Casio, por ejemplo, son ideales. Si añades funcionalidades como brújula, altímetro y cronometro, se convertirá en el aliado de cada escapada.
Si nos encontramos con un fashionista, las personas amantes de la moda, requieren de un reloj que vaya más allá de ser una mera herramienta, para consultar la hora. Para estas personas, el reloj no es más que un accesorio, un complemento que acompaña su look. Si el regalo es para alguien de estas características, y a quien le gusta destacar por su estilo único, el reloj debe ser una extensión de esa personalidad tan marcada. En consecuencia, hay que decantarse por diseños llamativos, de materiales modernos como el acero o incluso la cerámica, detalles de vanguardia y marcas como Fossil o Michael Kors. Aquellos que cuentan con modelos diseñados para los que buscan diseños actuales que se conviertan en el centro de todas las miradas.
Existen por igual, personas minimalistas. Aquellas que valoran lo sencillo frente a lo extravagante, lo funcional y lo práctico. Un reloj de diseño limpio, sin adornos innecesarios, refleja el gusto por la simplicidad y la elegancia de lo sencillo, sin esfuerzo. Decantarse en este caso por relojes con esferas simples, colores neutros y correas de cuero o malla metálica, siempre fina, son la elección más adecuada.
Nos queda la personalidad deportiva. Aquellos deportistas y amantes del ejercicio físico, necesitan un reloj que siga su ritmo y no al revés. Que marque la hora no es tan importante como que les controle el pulso. Aquellos que no paran de moverse, encuentran en un reloj deportivo, su compañero ideal. Relojes que resistan el sudor, el agua y, por supuesto, ayuden a mejorar el rendimiento deportivo con sus funciones, son el mejor regalo. Para estas personas, relojes deportivos con GPS, seguimiento de la actividad, resistencia al agua y funciones como medir el ritmo cardiaco, son la mejor opción.
Y para concluir, en el caso de que nos toque regalar a una personalidad soñadora y romántica, de esas que se dejan llevar por el corazón, valora los pequeños detalles y cree que detrás de cada acto u objeto hay algo, el reloj romántico es el adecuado. Diseños delicados, acabados suaves, materiales que transmiten calidez… un reloj de esfera decorada, colores suaves y elegantes o toques vintage, es perfecto para regalar a estas personas tan especiales.
